
Si alguna vez te has preguntado cómo hacer que mi gato deje de morder, no estás solo. Este es un comportamiento común entre los gatos, y puede ser frustrante para los dueños. Sin embargo, es importante comprender que los gatos muerden por diversas razones, desde el juego hasta la ansiedad, pasando por el dolor físico. Afortunadamente, con paciencia y las estrategias adecuadas, puedes enseñar a tu gato a dejar de morder y a comportarse de manera más tranquila. En este artículo, exploraremos cómo hacer que tu gato deje de morder, las causas subyacentes de este comportamiento y las mejores maneras de corregirlo, ¡así que sigue leyendo para encontrar la solución!
1- Comprende las causas del mordisco
Para saber cómo hacer que tu gato deje de morder, lo primero que necesitas hacer es comprender por qué lo hace. Los gatos muerden por una variedad de razones, y comprender estas causas te permitirá abordar el problema de manera más efectiva. A continuación, te contamos algunas de las razones más comunes por las cuales tu gato podría morder.

a) Juego excesivo: ¿Por qué los gatos muerden durante el juego?
Los gatos, especialmente los gatitos jóvenes, tienen una necesidad natural de morder mientras juegan. Este comportamiento es parte de su instinto de caza, ya que imitan los movimientos de cazar y atrapar presas. Sin embargo, aunque esto es completamente normal, puede convertirse en un problema si no se redirige adecuadamente. El exceso de juego también puede llevar a que tu gato desarrolle una tendencia a morder tus manos o pies como parte de su actividad lúdica.
b) Estrés o ansiedad: El mordisco como respuesta a emociones negativas
El estrés y la ansiedad son otros factores importantes que pueden llevar a tu gato a morder. Los cambios en su entorno, como la llegada de nuevos miembros de la familia (personas o animales), mudanzas o incluso la falta de estimulación adecuada, pueden generar incomodidad y ansiedad en tu gato. Como respuesta, tu gato puede recurrir al mordisco como una manera de defenderse o liberar tensiones.
c) Dolor o malestar físico: Un gato que muerde por dolor
Los gatos también pueden morder como una forma de defenderse del dolor o de la incomodidad. Si tu gato está experimentando dolor debido a una lesión, infección, o problemas dentales, podría morder como una forma de reaccionar ante el malestar. Este tipo de mordiscos no deben ignorarse y es importante consultar a un veterinario si crees que tu gato está experimentando algún tipo de dolor físico.
d) Sobreestimulación: Señales de incomodidad en tu gato
Otro factor que puede hacer que tu gato muerda es la sobreestimulación. Cuando acaricias a tu gato durante demasiado tiempo o en las zonas equivocadas, él podría empezar a sentirse incómodo o molesto. Las señales típicas de sobreestimulación incluyen un agitar rápido de la cola, un cambio repentino en su postura, o un leve gruñido. Si no se detiene el contacto en este momento, es posible que tu gato te muerda como una forma de decir «¡basta!».
2- Redirige su energía hacia algo positivo
Una de las claves para corregir el comportamiento de morder es redirigir la energía de tu gato hacia algo positivo y adecuado. En lugar de dejar que muerda tus manos o pies, asegúrate de que tu gato tenga acceso a juguetes apropiados para morder y jugar. Los juguetes ayudan a canalizar su energía y mantenerlo entretenido sin que tú seas su objetivo.

a) Juguetes interactivos y de varita
Los juguetes interactivos, como las varitas con plumas o los láseres, son excelentes para mantener a tu gato ocupado y activo. Estos juguetes permiten que tu gato persiga y ponga a prueba sus habilidades de caza, lo que puede reducir la necesidad de morderte. Además, los juguetes de morder, como los ratones de felpa o las pelotas de goma, pueden proporcionar una salida segura para que tu gato libere su energía sin causarte daño.
b) Estimulación mental: Mantén su mente activa
Además de los juguetes físicos, es importante que tu gato reciba estimulación mental. Los rompecabezas para gatos, donde deben resolver problemas para acceder a una golosina, son una excelente manera de mantener su mente ocupada. Esta estimulación mental puede reducir significativamente su tendencia a morder por aburrimiento.
3- Evita el castigo y opta por la redirección positiva
Cuando se trata de corregir el comportamiento de morder en los gatos, es fundamental evitar castigar al gato. Los gatos no asocian el castigo físico con su comportamiento, y más bien pueden desarrollar miedo o ansiedad, lo que solo empeoraría la situación.

a) Desvía su atención
En lugar de castigar, cuando tu gato comience a morder, desvía su atención inmediatamente hacia un juguete o un comportamiento positivo. Si lo haces de manera constante, tu gato aprenderá que morder no es una forma eficaz de obtener lo que quiere.
b) Reacción calmada
Si tu gato te muerde, lo mejor es reaccionar de manera calmada. Di “no” de forma firme pero suave y aparta tu mano sin mostrar enfado. Los gatos responden mejor a una actitud tranquila y consistente.
4- Proporciona un espacio seguro y cómodo
Si tu gato está mordiendo por estrés o ansiedad, asegúrate de que tenga un lugar seguro donde pueda retirarse cuando se sienta abrumado. Los gatos necesitan tener un espacio donde puedan relajarse sin sentirse amenazados. Este espacio debe ser tranquilo, con una cama cómoda y lejos de ruidos molestos o cambios abruptos.
5- Refuerza el comportamiento positivo con premios
El refuerzo positivo es una de las maneras más efectivas de enseñar a tu gato a comportarse de manera más tranquila. Cada vez que tu gato se comporte de manera apropiada, asegúrate de recompensarlo con una golosina, cariño o un juguete. Este tipo de refuerzo positivos ayudará a que tu gato asocie las buenas conductas con recompensas, y por ende, se repetirá.
6- Evita la sobreestimulación y respétale
Para evitar que tu gato muerda debido a la sobreestimulación, es importante que aprendas a reconocer las señales de incomodidad. No todos los gatos disfrutan de largas sesiones de caricias. Si notas que tu gato comienza a agitar la cola o se pone tenso, es hora de darle un descanso y evitar seguir acariciándolo en ese momento.
7- Consulta con un veterinario si es necesario
Si has probado diversas técnicas para hacer que tu gato deje de morder y el comportamiento persiste, es recomendable llevarlo a un veterinario. Puede que el mordisco sea un síntoma de una afección médica subyacente, como problemas dentales, artritis o una infección. Un examen veterinario puede ayudar a identificar cualquier condición de salud que esté causando el comportamiento agresivo.